Lo primero que llama la atención cuando visitas Carrizosa es el propio conjunto urbano, con calles de trazado irregular, algunas tan empinadas que para su tránsito se hizo necesaria la construcción de escalinatas, algo poco habitual en el Campo de Montiel.
Carrizosa se sitúa al norte del Campo de Montiel, entre sus vecinos Alhambra y Villanueva de los Infantes. El nombre de Carrizosa viene del término latino «carex-carisi» afino que significa carrizo, y que en otros tiempos hacía referencia a gran cantidad de esta planta en las proximidades del pueblo. Su origen se remonta a mediados del Siglo XIV, fue aldea de la villa de Alhambra y al mismo tiempo una de las encomiendas de la Orden de Santiago.
Los carrizoseños han conservado la fiesta de Las Cruces con todo su sabor tradicional y original, convirtiéndolas, junto a las Fiestas Patronales, en el mayor atractivo turístico-festivo del municipio.
La Encomienda de Carrizosa, según el inventario de 1609 poseía tierras que abarcaban parte de los términos municipales de Alhambra y Villanueva de los Infantes. La declaración de independencia no tardó en llegar, aproximadamente sobre el año 1620, en el que Carrizosa se emancipó de Alhambra después de pagar al Rey una importante suma de dinero.
Las tierras de Carrizosa estuvieron habitadas desde la Edad del Hierro. De esta época se han hallado vasijas funerarias. Con los bereberes, en las primeras décadas del siglo VIII, se fundó “La Carrizosa”, en el Cerro de la Ermita, a unos 3 kilómetros de su ubicación actual